Infusión de viernes, divagaciones y lecturas

Godmorgen!!

He cambiado el café de los viernes por una infusión de rooibos con naranja y flor de azahar, que vino desde Sevilla y que ahora que va quedando menos de la mitad me hace pensar si será fácil encontrarla por aquí o podrá ser la excusa perfecta para hacer una escapada a la ciudad hispalense (ahí lo dejo, en plan sueño en voz alta). 




VIERNES, "por fin es viernes" pensarán todos aquellos que hoy empiezan sus vacaciones, y los que las terminan se decantarán por un "cómo es posible que ya sea viernes", el caso es que ya ha llegado y para unos y para otros empieza el fin de semana.
Yo, en este año de escapadas de no verano y sin vacaciones como yo las concibo, me quedo con eso, con que hoy empieza el finde y aprovecho para contarte que he hecho balance de esta semana y de alguna cosa más .

Quería contarte que esta semana entre los días grises, los diluvios torrenciales y una migraña de récord,  he encontrado tiempo para sentarme a buscar inspiración, he añadido un montón de temas (léase lugares, experiencias y divagaciones) de los que me gustaría hablarte y también he eliminado otro buen montón porque no estoy segura de que encuentren cabida en este cajón desastre... 
Creo que necesito poner orden en mis ideas y voy a aprovechar que seguramente estarás de vacaciones (o en modo vacaciones en la rutina de agosto), y dedicaré parte de mi tiempo a repensar todo un poco. Volveremos a sentarnos a tomar un café, una infusión o lo que se tercie todos los viernes, los miércoles intentaré llevarte a algún sitio bonito, pero los lunes de agosto no habrá entrada, me gustaría dedicar ese tiempo a reorganizar.




Como tendrás un capitulo menos de mis novelas que leer (esto también tengo que hacermelo mirar, intentaré encontrar la forma de reducir la longitud de los post), y aprovechando que estoy volviendo a dedicarle mucho más tiempo a la lectura y estoy feliz, he pensando en compartir algunos de los libros que he leído, releído o estoy leyendo por si andas buscando lectura. 
  • La luz en casa de los demás de Chiara Gamberale, este libro entorno a la familia lo leí en italiano y me encanto de hecho ya tengo en mi lista de próximas lecturas otro de la misma autora. 

  • No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas de Laura Norton, también en proceso pero me está gustando, me hace reír aunque esté sentada sola en el tren y cuando lo hago el resto del vagón se gire hacia mi sin entender nada (A mi la sensación de reír o llorar, en resumen sentir, mientras leo me parece una de las mejores cosas que puede pasarte gracias a la lectura).
  • Por último, tres "relecturas" que en algún momento intento hacer. De Italo Calvino, uno de mis autores preferidos, Las ciudades invisibles y Si una noche de invierno un viajero; creo que no he leído nada que no me guste de Calvino pero estos dos libros son muy especiales para mi. Y el otro libro que puedo releer y reirme como la primera vez hace 20 años es Sin noticias de Gurb de Eduardo Mendoza, creo que vuelvo a leerlo como forma de agradecimiento a una maravillosa profesora de literatura. 


Creo que ya se ha enfriado lo que quedaba en la taza de infusión y lo mejor será preparar otra, además te dejó una buena lista de lecturas.

Buen finde, buenas vacaciones, buen regreso.


Papirøen: street food Copenhague

Godmorgen!!

Yo es que no sé a que hora vienes a visitarme, quizás sea un pronto para hablarte de comida... pero eso es de lo que toca hablar hoy.
Empezaré diciendo que en Copenhague (y Dinamarca) por lo general se come bien, otra cosa es encontrar fácilmente la ecuación comer bien sin gastarse un dineral. Más o menos te diría que deberías calcular que para dos con un plato cada uno, sin vino de por medio y con postre y cafe será difícil que bajes de las 500 kr, y eso siempre que sea a la hora de comer porque los platos a la hora de la cena siempre suben (que digo yo que siendo platos muy similares, el precio no debería fluctuar, no? Cosas de vikingos).  

Pero tampoco quiero asustarte porque también hay sitios en los que puedes comer bien, sin grandes desembolsos y sin necesidad de recurrir a cadenas de comida rápida y perritos.
De estos últimos tengo un top 3 que en breves compartiré contigo. Ay! Se me acumulan cosas de las que hablarte, pero es que he añadido en "mi libreta apunta ideas para el blog" (vía sugerencia IG) un nuevo apartado sobre comer en Copenhague y ya tengo en mente: un sitio romántico, un sitio divertido, una selección de italianos... 

Para empezar hoy quería recordarte que ya hace un tiempo te hablé de un vietnamita que merecía la pena visitar. Pero puede que a ti te encante la idea de comer rollo asiático pero que no sea la comida preferida de tus acompañantes, la solución para evitar el momento "a mi es que la pizza no me va, yo no como queso, yo preferiría hamburguesa, me gustaría comer un smorrebrød de esos de los de aquí", la tienes es un único lugar: Papirøen.





Papirøen  es un street food market en el corazón de Copenhague, una nave industrial convertida en un gran mercado donde poder elegir entre un montón de comidas distintas, sentarte en las mesas del interior o disfrutar de la terraza frente al canal y el edificio del nuevo teatro situado al final de Nyhavn. La verdad es que la idea de que el espacio ocupe el interior de una nave industrial no podía ser mejor, porque a ver quien se viene a comer al aire libre un día de esos un poco perros meteorológicamente hablando que tenemos por aquí.
Cuando llegues allí lo dificil será elegir qué comer: pizza, pasta, chino, japonés, coreano, hamburguesas, perritos, smorrebrød... Las opciones son muchas y baratas en general. De postre siempre puedes tomarte un helado o saborear una deliciosa tarta de queso o simplemente tomarte un café.









Alguna información práctica:

- Está situado junto a la sede temporal del Experimentarium (un buen sitio para visitar con peques) y muy cerca del edificio de la Ópera. Puedes llegar:
        + En en bicicleta atravesando el puente que lleva a Christianshavn.
        + A pie desde la parada del bus 9A en Princessegade Plads (3 min) o desde la parada de     
        metro de Christianhavn (15 min) 
       + En el "busbarco" 993 desde Nyhavn que pasa cada 20 min. entre las 9 y 18 hs, por cierto en
       este nada de bicicletas ni carritos de niño, en ese caso necesitas coger el 991 o el 992.




- Normalmente puedes pagar en metálico o con tarjeta, también tienes la opción de comprar su propia moneda "CowCash" en el bar que está situado justo a la entrada,  un "CowCash" equivale a 25 kr.



- Los puestos de comida únicamente venden comida (aunque suene redundante), la bebida tienes que comprarla en los bares situados a la entrada y al final de la nave.

- Está abierto todos los dias, de lunes a sábado de 11 a 22 hs y los domingos hasta las 20. Los jueves, viernes y sábados los bares están abiertos hasta más tarde y algunos días puedes disfrutar de conciertos en vivo.



Concluyendo, si te animas a visitar tierras vikingas, apúntate este sitio porque merece una visita.

Nos vemos el viernes para el café!!

Mis cuatro direcciones en Utrecht

Buenos días,


Como ya te conté parte de nuestra escapada de no verano la pasé en modo single, tenía que lograr entretenerme cuatro días yo sola por Utrecht y resulto que para callejear era un destino perfecto porque la ciudad tiene un tamaño ideal para descubrirla a pie, llena de calles y canales con encanto.

Puedes googlear "Utrecht" y encontrar esos imprescindibles que te acreditarán como una buena turista en la ciudad, pero ya sabes que me he empecinado en viajar y dejarme llevar, así que pedí algunas recomendaciones a mi gurú holandesa (ahora gurú belga) y con un mapa (para al menos volver al punto de partida) y el wifi gratuito del que puedes disfrutar en el centro de la ciudad, me eche a las calles.







Aquí van mis recomendaciones: una opción para dormir, una para comer, una para engañar el estomago y un buen café donde poder resguardarte de la lluvia (You are in the North, remember!!!).

* En la elección del alojamiento no tuve nada que ver, fue maridín el encargado de encontrarlo, yo sólo pedí que fuese un sitio desde el que pudiese moverme con facilidad y que incluyese desayuno, que dirás tú menuda tontería pero es que yo soy muy fan y ya sabes que además es la comida más importante del día. Tengo que confesar que cuando me enseño la elección, pensé... telita, yo lo hubiese hecho mejor!! Pero fue un zas en toda la boca, por lista. Nos quedamos en Star Lodge, un hotel a las afueras de Utrecht muy bien comunicado (7 minutos en bus al centro y 30 minutos a pie por un paseo muy agradable atravesando el parque De Voorveldse Polder). Yo diría que el hotel  es sencillo con una decoración nórdica que me encantó y a un precio inmejorable para lo que ofrece.









*Un sitio para comer que fue todo un descubrimiento, LOFT 88. El primer día que llegamos preguntamos en la recepción del hotel un sitio que no estuviese lejos para cenar y nos dieron dos opciones a menos de 25 metros a cada lado del hotel, un bistro francés que probamos y no estaba mal y esta otra opción que personalmente fue la que más me gusto. Una carta sencilla (presentada en una tabla, esto lo vi en varios locales en Holanda y Bélgica, así que debe ser el must del norte) con una cocina también sencilla que no gustó (repetimos!!), una decoración tanto en la terraza como en el interior que no podía ser más pinterest, el personal encantador y la cuenta endulzada.  










* En uno de los pocos momentos de couple por Utrecht estábamos paseando mientras hacíamos tiempo para encontrarnos con unos amigos, cuando vimos un local que estaba lleno (no de turistas) así que nos acercamos para ver que era lo que allí se cocía y... sorpresa: fuimos a dar con un sitio en el que sólo puedes comprar croquetas y patatas, pero qué patatas!!! Cuando nos dimos cuenta que había un pontón de familias que iban haciendo sus encargos para llevar, no lo dudamos había que probar. Si visitas Utrecht no lo pases por alto: FRIET WINKEL no es que vayas a hacer una comida o si, pero hay que probar esas patatas.  







Esta foto -ya compartida en IG- es mítica, la cara de la señora... querría también mis patatas? Esa mirada!!

* Estando por el Norte nunca estarás en modo single por mucho tiempo, la lluvia pensará que quizás quieras compañía, lejos de verla como una mala compañía dale las gracias, seguro que te empuja a encontrar un sitio bonito donde resguardarte. Yo una vez que he superado el miedo a estar sola, un poco por necesidad y un poco gracias al consejo de la doctora Bembibre de llevar siempre conmigo un buen libro, encontré el BAR BETON donde disfrute de mi momento de lectura con un buen café y una deliciosa tarta de manzana. Y oye, con una buena lectura y en un sitio bonito, de lo que menos te acordaras es de la lluvia que pretendía acompañarte.











Aunque fuese con lluvia, casi que me teletransportaba a Utrecht porque creo que sufrí un flechazo, y a ti, te han entrado ganas de visitarla?

Ya sabes lo que te espera esta semana, disfrutar de las vacaciones o decidirte a veranear en tu rutina.


Café post escapada de (no) verano 2015: me hago mayor

Godmorgen!

He vuelto de mi #EscapadaDeVerano2015, te he preparado un café en uno de mis sitios favoritos, allí donde voy a disfrutar de relajantes paseos. 
Por fin esta semana lo he conseguido, sólo tenía que esperar a que los daneses escapasen despavoridos al sur para que pudiésemos disfrutar de un café al atardecer en uno de los embarcaderos de #LosLagosDeIverina.




Voy a empezar con algo así como un lamento mezclado con una declaración de intenciones: quiero que este sea el último verano que me quedo sin vacaciones en el Sur pero no quiero hacerme ilusiones  que esté año ya me visualizaba pasando mis dos semanas en España y al final, por razones varias, lo más cerca que hemos estado ha sido poco más arriba del Canal de la Mancha.
Los planes a veces salen y otras veces no, y yo que siempre intento mantenerme optimista sé que no puedo engañarme: el verano 2015 fue aquella semana de principios de julio y punto. En este caso, por mucho que me empeñe en soñar con días de verano se impone la realidad.
Me temo que últimamente me quejo bastante (principalmente via Instagram) del horroso tiempo que estamos sufriendo esta año por tierras vikingas... Pero es que yo no quería un verano de 3 meses con temperaturas alrededor de los 30 grados,  yo me habría conformado con que se repitiese el julio del año pasado (1 mes señores!!! 1 mes!!) Yo no necesito altas temperaturas, soy una chica del Norte que está más que acostumbrada a los veranos cantábricos, los de dos días de playa, un día de lluvia y un día de niebla... En resumen, que yo lo que quería era un verano que no durase siete días; así que no sé quien tiene que tomar nota, pero a mi me deben un verano.
Dicho esto, puedo prometer y prometo que intentare no obcecarme con el tema porque por el sur quedan todavía casi dos meses y me cansaré de ver verano por todas partes. Así que sí ves que no cumplo y me enfurruño con el temita meteorológico, un zasca en toda la boca, please!!




Y una vez que me he desahogado un poco, quería contarte que en la escapada de (no) verano he descubierto que me hago mayor, (menudo descubrimiento a tu edad, pensarás tú). Pero no es una conclusión a la que haya llegado "a lo loco",  he encontrado buenos argumentos que el tiempo pasa y yo ya empiezo a notarlo, porque:

* Ya no me gustan las hordas de turistas, desvirtúan la belleza de cualquier ciudad y Brujas fue un claro ejemplo, una ciudad que se transforma cuando a las seis de la tarde sus calles se vacían. Paseé y callejeé bajo "l'orbayu" (llovizna en castellano) y como lo hacíamos casi en solitario, disfrute de los pequeños detalles, los que no eres capaz de ver escondidos entre camisetas de colores veraniegos que transforman una pequeña ciudad medieval en una mini Torre de Babel. Tampoco quiero decirte que antes fuese una fan incondicional de las manadas de turistas, pero decididamente necesito mi espacio.
Por si tienes dudas, te diré que los turistas aquí en el norte se reconocen o por venir preparados para travesías por el polo norte (que digo yo que han interiorizado el rollo sauna y la llevan incorporada) o por ser aquellos que oyeron la palabra crucero, se visualizaron bajo una palmera y ni juntando todos los pareos logran poder entrar en calor (ah bueno y porque por aquí, al menos por tierras vikingas, son ellos  -los adultos- bastante sobrios en cuanto al vestir, así que en cuanto veas un grupo vestido con una oda a la primavera, ahí los tienes).

* He descubierto que los sitios donde hay que entrar son aquellos donde sólo veas concentración de autóctonos o aquellos en los que la guía no te señale ningún imprescindible. Con solo este argumento, en Utrecht nos comimos las mejores patatas fritas que había probado en muchísimo tiempo, en Amsterdam disfruté de un café junto a un canal donde acabe compartiendo conversación con una mama holandesa y su bombón de dos años, en Bruselas los mejores anfitriones nos descubrieron el mundo de la cerveza y galerías que esconden maravillosas librerías, en Gante tuvimos la oportunidad de vivir una pequeñísima porción de su festival callejeando sin rumbo atraídos por todas las posibilidades que ofrecía la ciudad.

* Una obviedad, pensarás tú,  pero me he vuelto a dar cuenta que mi mano termina donde acaban mis dedos, que no nací con el smartphone pegado a la mano ni una cámara al cuello, que es fantástico congelar recuerdos en forma de fotografía pero que es mejor vivirlos, que en un viaje no debo buscar la foto más bonita sino la que me permita revivir un determinado momento (importante "revivir"!!), que no necesito hacer mil fotos porque ocuparan mucho espacio y luego la pereza se adueñara de mi a la hora de hacer limpieza y poner orden.

* No es sólo cosa del calendario, de haber dejado atrás mi adolescencia, mis veintitantos y muchos taitantos, pero es una certeza: ya no me fijo en escaparates de ropa, las tiendas de decoración me llaman y no logro hacer oídos sordos a su llamada. Pasé parte de la escapada de verano en modo single, acabé haciendo algo shopping, pero no hay nada que pueda estrenar (pelea con el espejo que me ahorro). He descubierto tiendas llenas de boniteces y me he vuelto a topar con aquellas que ya conocía y a las que inevitablemente mi subconsciente me dirigió. Se han venido en el maletero platos, cubiertos y hasta una cabeza de jirafa para el salón... No sé si esto acabará siendo mejor o peor que el momento fashion, ver veremos.

Básicamente he descubierto que poco a poco yo misma he dejado de ser turista y me he convertido en  viajera, que era algo que se lo había oído decir a Conchi a través de Baballa, tanto es así que cuando me tope con este escaparate pensé que indudablemente se trataba de una señal.




Me voy a ir despidiendo hasta la próxima semana cuando volveré para compartir contigo algunas de mis direcciones de esta #EscapadaDeVerano2015 o algún plan vikingo, por si te dejas caer por el norte buscando el fresco.




Si estás preparando la maleta, disfruta de todo lo bueno que vas a vivir.
Si estás deshaciendo la maleta, no te castigues pensando que lo bueno ha terminado, deja la lavadora puesta y sal a pasear, aprende a veranear en tu rutina.

Como moverte en Copenhague sin bici

Bonjour!!

En unas horas dejamos Holanda y ponemos rumbo a Bruselas, han estado bien estos días de turisteo en modo single pero tengo ganas de recuperar el modo couple, y sobre todo, tengo ganas de llegar y reirme porque esa es la verdadera razón de la siguiente parada en nuestra #EscapadaDeVerano2015 reencontrarnos con amigos y disfrutar de la buena compañia.

Este post será un poco aburrido, dejo para la tranquilidad de estar de vuelta en casa todo lo bueno que he encontrado en Utrecht. Está escrito pensando en quien tenga previsto viajar a Copenhague y no tenga muy claro como moverse; es verdad que no se trata de una gran capital, imposible de conocer a pie y que además la bicicleta pueda ser una de las mejores formas de conocerla.
Vamos a partir de un supuesto: lo de las dos ruedas no acabas de verlo, y quieres salir del centro de la ciudad, visitar otras playas, largos, castillos... Y entonces los autobuses y trenes serán tu mejor aliado.
Lo primero que puedo decirte en ese caso, es que el sistema de transporte funciona estupendamente pero exige saber unas cuantas cosas previas que te permitirán ahorrar dinero y moverte con rapidez, debes saber que pagaras en función de las zonas que atravieses (si no piensas alejarte de Copenhague, nunca pagarás más de dos zonas).




Para saber el número de zonas o que medio de transporte es el más adecuado, mi primer consejo es que te descargues una app para tu movil que se llama "Rejseplanen" (Itinerario/ plan de viaje). Con ella y con wifi (algo relativamente fácil de conseguir gratis) podrás conocer la mejor combinacion para llegar a tu destino desde el lugar en el que te encuentres. La app es totalmente intuitiva, basta con indicar la dirección o lugar que quieres visitar y te dará diferentes posibilidades incluyendo distintas combinaciones (bus, metro, tren, a pie), pero también el precio del billete y aquí es donde podrás ver la diferencia que existe entre comprar el billete en las maquinas automáticas, al conductor del autobús, o hacer una pequeña inversion y comprarte una "Rejsekort" (que no cunda el pánico porque está también en inglés!!).



La "Rejsekort" es una tarjeta que puedes comprar en distintos lugares: en el aeropuerto, la estación central, algunas maquinas automáticas de las estaciones de metro o en algunos tiendas 7-eleven, te dejo la lista aquí.
Hay distintos modelos de tarjeta de transporte, pero estando de visita deberás comprar la "Rejsekort Anonymous", aunque seáis varios podrás comprar una sola, ten en cuenta que los niños menores de 12 años pueden viajar gratis si están acompañados de un adulto con billete válido.




La tarjeta cuesta 80 DKK (10,70 euros) no reembolsables y tampoco a descontar de los viajes que vayas a hacer, tendrás que ir recargándola, si bien cuando esté por debajo de las 50 DKK ella misma te avisará (inciso: nada de hacerse el loco, hay revisores y aparecen en cualquier momento, si coges el tren o el metro al aeropuerto  con seguridad te los vas a encontrar, la multa por viajar sin billete  es de cuantía única y asciende a 650 DKK = 87 euros).

¿Cómo funciona? En todas las estaciones de tren y metro, y en las puertas de entrada y salida de los autobuses encontraras una máquinas con un circulo azul ("check ind" / "check ud") al que deberás acercar tu tarjeta. 
En el caso de que vayas a utilizar varios medios distintos, deberás hacer "check ind" cada vez que cambies de transporte y únicamente "check ud" cuando hayas llegado a destino; si te olvidas de hacerlo al inicio o te saltas el "check ud" al final directamente se te descontarán 60 DKK.
Si habéis comprado una tarjeta para usar varios, en el caso del autobús deberás avisar al conductor para que habilite la máquina, en el caso de que vayas a coger el tren o el metro el "check ind" podrás hacerlo en las mismas máquinas que te permiten hacer las recargas o en unas especificas (las reconceras porque llevan escrito "Ekstra" y los símbolos "+ -"); para el "check ud" aunque seáis varios solamente tendrás que recordar pasar la tarjeta al finalizar. 



Para que entiendas como funciona lo de las zonas y las diferencias de precio del billete, vamos a pensar que quieres irte desde Copenhague hasta Hensingørg para visitar el castillo de Kromborg; en ese caso el  incluye todas las zonas; si compras el billete de modo individual pagaras 108DKK, si utilizas la "rejsekort" 39,20 DKK (standard class), como ves la diferencia es bastante grande.
Hay una tercera opción que te exige conexión a internet sí o sí y es comprar el billete a traves de un app "mobilbilleter" en el ejemplo que te decía el precio del billete serían 67,50 DKK, lo que tienes que tener en cuenta de está opción es que necesitas saber con exactitud el número de zonas que vas a atravesar.

Un par de cosas más, la "Rejsekort" la puedes utilizar en los "autobuses barco" que recorren el canal (no los turísticos!! aunque son una buena alternativa a estos), y en el caso de que hayas decidido comprar la "Copenhague Card" todos los trayectos que vayas a hacer están incluidos desde que se activa.

Me ha quedado un poco tostón, pero es información práctica que espero que le pueda ser útil a alguien.
Me voy a seguir turisteando en este "no verano del norte"!!

Aqui si hay playas!!

Godmorgen!!

Aquí seguimos de escapada de verano, que no son vacaciones ni tampoco veraneo.
Un día de estos voy a hacer una lista de las cosas que echo de menos, por ejemplo... echo de menos la montaña porque siendo de Asturias siempre han estado ahí cerca, han formado parte del paisaje que me ha acompañado a diario durante muchos años y esa frase de madre "mira como está para el Naranco" para receordarte que debías coger el paraguas si o si.
Aun así, soy más de playa y echo mucho de menos el azul intenso del Cantábrico y sus olas porque  me traen recuerdos de juegos y risas con amigos, de ratos convenciendo a mi hermana para entrar siempre un poco más adentro, de la mano de mi abuela... si pudiese revivir un sólo momento creo que me iría a pasear con ella por la orilla a recoger conchas y después a saltar olas...
Como aquí no tengo olas, las playas bálticas me han hecho un regalo: me han descubierto la tranquilidad que me da pasear cerca del mar en cualquier estación del año, y esos paseos me dan media vida, porque está claro  que al menos he tenido dos vidas anteriores, y en una fuí un pez feliz.





Por eso, aunque probablemente no vengas con la idea de pasar un día en la playa o de darte un baño en el Báltico voy a darte algunas opciones "playeras", ya sabes que en verano mis playas preferidas están al norte de la isla (Hornbæk, Gilleleje y Tisvildeleje) pero también tienes algunas más cerca de Copenhague si te surgiese la necesidad.


1) Fisketorvet
No es exactamente una playa en sentido estricto, se trata de una zona habilitada para el baño en el canal. Se encuentra cerca del centro comercial "Fisketorvet", de ahí su nombre y a menos de 10 minutos a pie desde la estación central. Cuenta con vigilantes y tres piscinas distintas: para niños, para nadar y para bucear.
Si has alquilado una bici, acércate aunque solo sea por atravesar el puente exclusivo para bicis que comunica los dos lados del canal.

Via www.aok.dk
2) Island Brygge
Como la anterior se trata de una zona de baño en el canal, pero es más grande porque cuanta con cinco piscinas distintas. También cuenta con puestos de vigilancia y en los días de calor (pocos pero los hay) suele estar llena. Su mayor atractivo las vistas de la ciudad.


Via www.denmark.dk

3) Amager Strandparken

Aunque esta vez se trata de una playa, tengo que decirte que no es del todo natural aunque seguramente si la visitas nunca lo pensarías. Son más de dos kilometros de largo en una isla artificial donde podrás disfrutar de un día de playa, practicar deporte o montarte un picnic o una barbacoa (facilísimas de conseguir en cualquier supermercado).
Uno de sus atractivos son las espectaculares vistas del puente Øresundsbroen que conecta Dinamarca y Suecia.


Via www.amager-strand.dk

4) Kaastrup Strand

Se trata de la playa que encontrarías si vas en dirección al aeropuerto desde Amager Strandparken, y como la anterior las vistas del puente y el parque eólico son impresionantes. Lo realmente impresionante es la zona de baño, una verdadera delicia arquitectónica, que me muero por visitar durante la noche con la iluminación de la propia plataforma de baño.
Esta playa podría ser una buena oportunidad si vas a pasar el día en el Den Blå Planet, el acuario más grande del norte de Europa inaugurado apenas hace dos años. Realmente lo que más me gusto fue el propio edificio (de hecho, la entrada me parece excesivamente cara incluso para ser Copenhague); el edificio tiene forma de espiral inspirado en las corrientes circulares de una bañera, y por os materiales con los que ha sido construido me recordó al Guggenheim de Bilbao.


Via www.visitdenmark.dk


Via www.visitdenmark.dk
5) Bellevue Strand
Sin duda, de todas las que hoy te he hablado, esta es mi favorita y una de las que más suelo visitar durante todo el año. Además de la zona de arena blanca y la consiguiente zona verde, las razones por las que te recomendaría visitarla parten de su ubicación:
- Frente al Teatro Bellevue diseñado por Arne Jacobsen, que también diseño las dos torretas de la playa.
- A cinco minutos a pie de la estación de tren  de Klampenborg, y  por tanto de unas de las entradas al Dyrehaven.
- A escasos 10 minutos a pie del pequeño pueblo pesquero de Tårbæk.





Para estar de escapada de verano, menudo rollo te he soltado.

Muchas gracias por haber aguantado hasta el final, estás hecha una campeona!!