Eso que llaman puente de diciembre

Buenos días,

¿Disfrutando del puente? Qué bueno esto de tener unos días de descanso, no? Y que conste que aquí los autóctonos no son tontos y lo tienen bien montando, concentran los "broer" vikingos en los meses de mayo y junio por eso de disfrutar de largos días de luz pero durante la oscuridad invernal nada de nada.

Me he puesto a recordar lo significaba la llegada de estos días sin clase primero y después sin despertador para el trabajo y para mi, creo que el primer fin de semana de diciembre era algo así...

Aquellos primeros días de diciembre suponían el pistoletazo de salida a la Navidad y eso significaba que:

• Había que poner el árbol.
• Había que decidir donde iba el Belén.
• La casa se empezaba a llenar de dulces típicos (en la mía, el turrón de Suchard siempre nos ha gustado tanto que solo faltaba meterlo de relleno en el bocadillo).
• Había que ir escribiendo la carta a los reyes magos, y más tarde pensar  también en el detalle de Papa Noel (el señor de rojo empezó a parar por casa mucho después). 
• Mi madre comenzaba a preguntar qué nos apetecía para cenar (puedo jurar que el menú apenas ha variado a pesar de la pregunta que sigue repitiéndose año tras año)
• Cuando llegó la época universitaria, la nueva preocupación añadida era pensar el modelito para Nochevieja  (pobre t"atina" volviéndola loca cada año con el modelo, y cada año superándose).

Como los daneses no tienen a bien celebrar la constitución española y no hemos tenido "bro" vikingo, estos primeros días de diciembre ya no son lo que eran: el árbol está puesto desde hace dos semanas (y ya sabes que retrasada respecto a los vecinos), el belén no sabemos donde lo guardamos el año pasado quizás lo encontremos en semana santa, los dulces navideños nos los traeremos en la maleta para la segunda parte de las navidades, la carta para los señores de Oriente se ha transformado en una wish list para que facilitarles esa labor y que se equivoquen lo menos posible, la pregunta sobre la cena de nochebuena estará al caer vía skype y de la nochevieja ya tenemos una media idea... el modelo, arreglada pero informal ;)

¿Cuantas veces te he dicho ya lo de que voy haciendo mayor? Al menos, que recuerde ya te conté algo de esto aquí, pues parece claro que con esto de la Navidad me vuelvo a dar cuenta de que parece que me voy haciendo mayor. 

Eso sí, hay algo que sigo conservando: la ilusión, la de llegar a casa en modo anuncio de turrón, la del reencuentro con amigos a los que haces meses que no ves y también con los que te has visto hace poco pero te mueres de ganas por abrazar, la de ver abrir los regalos, la de abrir los propios, la de escribir mis postales (este año voy con retraso!!), los chocolates con churros, las castañas asadas paseando por Oviedo, las comidas y cenas con risas...
Qué me gusta tener motivos para no perder la ilusión. 

Hoy no me extiendo que tú seguramente estarás de puente y yo, por fin hoy volveré a la calle!! Cruza los dedos para que no haya recaída que son muchas las razones por las que quiero llegar a casa la próxima semana a tope de energía. 

* He aprovechado algunas fotos de la visita al Frilandsmuseet el año pasado en Navidad.