Participar del cambio conscientemente

Como escribía en el último post participar en la manifestación del 8 de marzo ha sido un revulsivo que me ha servido para tomar más consciencia de un problema al que durante un tiempo no había prestado demasiada atención, y ya iba siendo hora.


Me he dado cuenta de la necesidad de participar del cambio desde las propias aptitudes,  desde la consciencia de lo que sucede a nuestro alrededor, echándole sentido común a la vida que parece que es lo que nos sigue faltando y siendo capaces de ponernos en el lugar del otro para alcanzar a ver otras perspectivas.
A veces no se reacciona a tiempo, al menos eso me suele pasar a mi, que siempre estoy dándole vueltas a lo que podría haber dicho o hecho, pero no dije o hice, a veces por vergüenza, por timidez o por miedo. 
Así que decidí ir apuntando situaciones en primera persona de esas que igual ya tenía tan interiorizadas que ni cuenta me daba y así poder analizarlas desde esa consciencia que me dejo la resaca emocional del que sigo pensando fue un día histórico. 

Y no pasa nada.

Los últimos días han pasado tantas cosas que siempre me metía en la cama y apuntaba una idea para escribir, pero la idea de poner el despertador un poco antes para hacerlo no me convencía lo suficiente.

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Este es un post de divagaciones varias e inconexas, un recopilatorio de las ideas que copan las notas de mi móvil, de las consecuencias de la resaca emocional del 8 de marzo, de verdades incómodas, de titulares periodísticos, de redes sociales, de respuestas que decides callar y deberías haber soltado sin que pase nada.

Lee lo que te gusta - Febrero

Aquí van mis últimas lecturas, sigo tal como estaba hace un mes teniendo menos tiempo disponible del que me gustaría, y para colmo, me he entrado la necesidad de alejarme por un tiempo de los dramas, que ya tengo suficiente con los que me monto yo en la cabeza; con una mejor gestión del tiempo, siguiente objetivo: apuntarme a clases de teatro.



Total, que necesito lecturas que me saquen sonrisas pero no estoy preparada para dar un salto al vacío de la comedia romántica, yo lo que necesitaría es que saliese a la luz el nuevo libro de Javier Aznar, que David Trueba anunciase que está a punto de finalizar una nueva novela o que hiciera lo propio Elvira Lindo, por citar algunos ejemplos.